«Yo, Thomas Bernhard, nacido el 9 de febrero de
1931, escritor, Ohlsdorf, Obernathal 2, dispongo
mis últimas voluntades como sigue: […] Durante la
vigencia de los derechos de autor legales, no deberá
representarse, imprimirse ni presentarse siquiera dentro
de las fronteras del Estado austriaco, cualquiera que
sea el nombre que éste lleve, nada de lo por mí escrito
en cualquier forma: ni de lo que por mí publicado en
vida, ni de lo que exista en mi legado, en cualquier
parte, después de mi muerte.
» Expresamente subrayo que no quiero tener nada que
ver con el Estado austríaco y que me opongo para
siempre no sólo a toda intromisión, sino también a
todo acercamiento de ese Estado austríaco en lo que a
mi persona y mi obra se refiere.
» Después de mi muerte no deberá publicarse ni una
palabra de mi posible legado literario, dondequiera que
se encuentre, en el que deben entenderse comprendidos
mis cartas y papeles».
(Miguel Sáenz, Thomas Bernhard, una biografía,
Ediciones Siruela)